¿Por qué aparecen las manchas?
Son una reacción normal de la piel a años de exposición al sol. La luz ultravioleta, que tienen los rayos solares así como las cámaras de auto bronceado, aumenta la producción de melanina en la capa superior de la piel. Normalmente esto se convierte en un bronceado, pero es fácil crear una acumulación de melanina que lleva a la aparición de manchas marrones, a menudo asociadas con el envejecimiento prematuro.
¿Son estas manchas un signo de envejecimiento prematuro?
La expresión “manchas de vejez” es un poco engañosa porque estas irregularidades en la pigmentación de la piel no están directamente relacionadas con el paso del tiempo. Ciertamente con la edad la exposición solar acumulada aumenta, lo que significa que es probable que se vean más manchas oscuras en las manos a lo largo de los años. Sin embargo, incluso los niños pueden desarrollar manchas de edad, aunque se reconocen simplemente como pecas.
¿Cuáles son las causas del envejecimiento prematuro de las manos?
Como hemos mencionado antes, la principal causa de estas manchas oscuras es la exposición a los rayos UV, que incluye pasar tiempo al sol sin protección solar y en cámaras de auto bronceado. Sin embargo, hay otros tres factores que pueden aumentar las posibilidades de desarrollar manchas solares.
- Genética: Si tus padres tienen manchas de edad o pecas, es más probable que las desarrolles.
- Medicamentos: Pueden aumentar la sensibilidad de la piel a la luz solar, lo que significa que pueden aumentar el riesgo de desarrollar manchas solares.
- Tono de la piel: La piel pálida es más susceptible a las manchas de la edad porque produce naturalmente más melanina como forma de proteger las capas más profundas de la epidermis.
¿Cómo prevenirlo?
Para evitar que las manchas de la edad se desarrollen en tus manos, evita pasar largos períodos al sol y recuerda aplicar siempre protector solar en el dorso de las manos, independientemente del clima o la estación del año. Recuerda que los rayos UV están presentes todo el año, incluso en invierno y en condiciones nubladas. La luz pulsada es capaz de reducir las pigmentaciones de la piel, como las relacionadas con el envejecimiento. Usando una pieza de mano especial, los pulsos de luz llegan a los puntos a intervalos regulares. Al final del tratamiento, las manchas suelen oscurecerse para parecer costras. El siguiente paso es la exfoliación (normalmente después de unos diez días) y así es como las manchas tratadas desaparecen. El tratamiento es seguro e indoloro, pero es esencial no exponer la zona tratada al sol e, incluso después, utilizar un producto con un alto factor de protección.