Con el año nuevo llegan los – reconozcámoslo, innecesarios – propósitos para el 2020. Sí, ya sabemos que seguramente quieres ir por fin 3 días al gimnasio, hacer dieta, o no gastar tanto en rebajas. Pero, ¿realmente crees que hace falta? ¿Qué hay de malo en ir al gimnasio solo cuando puedes o quieres? ¿En comer lo que te apetezca o darte los caprichos que te dé la real gana en rebajas?
Haznos caso y no empieces el año atormentándote por todo lo que tienes que conseguir. Créenos, centra tu atención en pequeños objetivos que crees que realmente pueden hacerte sentir mejor y empieza el año con más positividad que nunca, y ¡sin presión. ¿Necesitas ideas?
-
1 Larga vida a los domingos por la tarde
Son las 16h de un domingo cualquiera, y mientras te despides del fin de semana te invade el miedo del fin del fin de semana – valga la redundancia -. Y es que es ese momento en el que empiezas a recordar lo que dejaste pendiente el viernes a última hora e incluso empieza la tentación de abrir el correo electrónico. ¡Alto ahí! El fin de semana no termina hasta que no suena la (maldita) alarma de los lunes por la mañana, así que¡intenta alargarlo lo más que puedas! ¿Qué tal un masaje, un baño relajante o una sesión de cine? Cuanto más disfrutes del domingo, mejor será el lunes. Palabrita.
-
2 Busca tus nuevas primeras veces
¿Recuerdas la emoción que teníamos de niños al cumplir nuestras primeras veces? La primera vez que montas en avión, la primera vez que te bañas en la playa, la primera vez que vas a la nieve o la primera vez que te vas de viaje. Busca tus nuevas primeras veces entre las cosas que aún tienes pendientes y ¡a por el 2020!
-
3 Cambia tu punto de vista
Sí, sabemos que siempre habrán cosas en esta vida que te molestarán, que te sacarán de quicio y que odiarás más que a la canción del verano que te cada año se te pega sin remedio. Así que buscar nuevas formas de lidiar con ellas, puede hacerte la vida más fácil. ¿Qué tal una cerveza con tus compañeros de curro para hacer la vuelta más llevadera? ¿O salir a cenar entre semana porque sí? Pruébalo, puede cambiarlo todo 🙂
-
4 Detox time (pero de las redes sociales)
Admitámoslo: que lo último que hagamos cuando nos vamos a dormir y lo primero que hagamos al despertar sea mirar el móvil, puede querer decir que estamos un poquito enganchados (léase poquito de forma irónica). Que sí, que es una forma de socializarse y de inspiración, pero también puede provocar ansiedad. Intenta pasar algunos momentos sin estar pendientes del teléfono, aunque solo sean un par de horas al día. Cuesta al principio, pero ¡te sorprenderán sus efectos positivos!
-
5 Concédete un parón
Para lucir hay que sufrir, dicen. La verdad es que: sí-y-no. Sí porque obviamente que necesitamos hacer ejercicio regularmente y darlo todo en el gimnasio, pero éso no lo es todo. Parar y concederse un break es tan o más necesario que todo lo demás. Una sesión de spa o un masaje pueden hacer que aún te sientas mejor contigo mismo. Mente sana in corpore sano.
-
6 ¿Por qué no un nuevo color?
Una de las peores cosas de la mayoría de los propósitos de año nuevo es que normalmente son tan difíciles de conseguir como fáciles de romper. Así que.. ¿por qué no te planteas algunas que sean más fáciles de conseguir? Apuesta por una nueva tendencia de belleza que no te hayas atrevido a probar, corta un par de dedos más tu pelo (¡siempre crece!), o arriesga con el maquillaje. Sí, pueden parecer fáciles pero, y ¿la satisfacción que te dará cumplirlas?