La espera ha llegado a su fin. ¡Viva! Por fin Aitana ha presentado su primer álbum llamado nada más y nada menos que ‘Spoiler’. Y sí amigos, es una pasada. Pero el spoiler del que queremos hablar nosotros es diferente. Sí, sí, que todavía hay más oye. Y es que hemos analizado el look de Aitana y tenemos que confesar que ya sabemos cuáles son sus truquillos para estar siempre perfecta.
De la cabeza a los pies, te contamos qué es lo que le hace esta chica para ir monísima siempre (como dicen en ‘Aquí no hay quien viva’). Y así, si quieres, ¡tú también puedes copiarle el look!
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1 El flequillo perfecto
Sin lugar a dudas, el flequillo es la seña de identidad de Aitana. ¿Y cómo lo hace para que le quede siempre tan bien? ¡Fácil! Lo importante es tener el pelo suave, ligero y brillante. Nada que no pueda solucionar una buena dosis de hidratación extra. Y para el corte, lo mejor es consultar con tu peluquero para ver cuál es la forma que le queda mejor a tu cara. El flequillo de Aitana por ejemplo es largo, recto y un poquito desfilado por los lados.
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2 Eyeliner delineado
El eyeliner es otro de los favoritos de Aitana a la hora de maquillarse. Y es que ella sabe cómo sacarle partido a su mirada con una línea de ojos delineada. Normalmente no suele salir del negro, pero oye si tú quieres innovar para el verano, ¡ahora también se lleva el eyeliner de colores!
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3 Mechas californianas
Como la canción dice: Vaya, vaya, aquí no hay playa – sin mechas californianas. Porque si hay un must para el verano, estos son los reflejos rubitos bañados al sol. Y Aitana lo sabe muy bien. ¿Cómo hacérselos? Puedes pedir en tu peluquería las mechas balayage o californianas y para un look totalmente natural, escoge dos tonos más claritos a tu melena.
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4 Lifting de pestañas
Y con el eyeliner no podían faltar unas pestañas XXL como mejor aliado. ¿Cuál es el truco de Aitana? Un lifting de pestañas. Así consigues un efecto natural, alargando las pestañas, ¡que te dura seis semanas! Se acabó lo de ponerse máscara de pestañas cada mañana. Luce una mirada es-pec-ta-cu-lar en un pis pas. ¡Y listo!