Nacido en Brasil, el alisado de keratina es un tratamiento capilar súper prometedor. De ahí que celebrities como Michelle Obama o Jennifer Aniston sean fieles a esta técnica, por lo suave, liso y brillante que les deja el pelo.
Lo hemos probado y nos ha chi-fla-do (ciao, encrespamiento). Además, la idea de volver a tener una melena sana y sedosa (como cuando éramos adolescentes), es algo que llevaba tiempo teniendo en mente. Así que ahora, con la vuelta a la rutina, he decidido lanzarme a ver si consigo devolverle a mi pelo *parte de* la salud que ha podido perder este verano. No sólo cortándolo (aunque, por si te interesa, estos son los cortes de pelo del otoño), sino intentando protegerlo lo máximo posible. Y como sé que pueden estar surgiéndote las mismas dudas que a mí, quiero compartir contigo nuestra investigación. En qué quedamos: ¿es la keratina (realmente) mala para el pelo?
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1 ¿Cómo funciona?
La sesión comienza con la aplicación de un champú seguido de un producto a base de keratina. Tras 20 minutos aprox, se aclara y se seca el pelo. A continuación, proceden a alisarlo con planchas de cerámica, lo aclaran de nuevo y comienza un nuevo alisado que sellará la keratina. El proceso, como tal, dura unas 3 horas, así que tráete un libro (o, en su defecto, el movil bien cargado).
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2 Sus componentes
El alisado brasileño está compuesto en gran parte por fibras de keratina, una proteína natural presente en el cabello en un 95%. ¿Su función? Protegernos de las agresiones externas como: rayos UV, contaminación, lluvia y calor. Sin embargo, las normas establecidas por la Unión Europea especifican que la keratina empleada para el alisado no debe contener más del 0,2% de formaldehído (formol), una sustancia química que -si se inhala durante un largo periodo de tiempo- puede causar iriritaciones e incluso resultar cancerígena. Por ello, es fundamental hacerte el alisado brasileño en una peluquería y no en casa, así como optar por establecimientos que utilicen marcas verificadas para un tratamiento 100% seguro.
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3 Ventajas (+1) y desventajas (-1)
La principal función de la keratina es devolver dicha proteína a cada hebra capilar. Por eso, el alisado brasileño va a fortalecerte el pelo, le dará *mucho* brillo y acabará con el encrespamiento a la vez que reforzará su protección. Visto así, las ventajas son numerosas pero hay que tener en cuenta que nuestra melena perderá una buena parte de su volumen. La técnica emplea altas temperaturas y, por ello, aconsejamos que en cabellos finos o muy dañados se emplee la SteamPod, una plancha a base de vapor para conseguir un resultado increíble sin estropear el pelo.
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4 Consejos 'post-alisado'
Hay algunas reglas a seguir para que los resultados de la keratina sean duraderos. Por ejemplo, para mantener el brillo y la suavidad después del tratamiento, evita lavarte el pelo durante los 3-4 días posteriores. Utiliza un champú y un acondicionador enriquecidos con keratina (y sin sulfatos) y no te recojas el pelo durante, al menos, dos días. ¡Ah! y si puedes, invierte en una almohada de seda: es un material que ayudará a mantener a raya el encrespamiento al limitar la fricción durante la noche.