Si tuviéramos que elegir un único ingrediente activo para cuidar nuestra piel, definitivamente sería el retinol. Y es que, la vitamina A, puede con todo (cuando digo todo, es todo): exfolia, reduce el acné, suaviza las arrugas, iguala el tono de nuestra piel y un sinfín de virtudes que lo mantienen liderando el ‘podium’ de los activos cosméticos.
Debido a que existen infinidad de leyendas urbanas sobre el retinol y a que su uso requiere conocimientos previos, te explicamos qué es, cómo se usa y qué puede hacer por tu piel. Simplemente, porque te deseamos lo mejor y porque ‘compartir es vivir’.
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1 ¿Qué es el retinol?Básicamente, el retinol es una forma de vitamina A. Los diferentes tipos de esta vitamina y sus derivados se conocen también como retinoides, siendo el retinol y la tretinoína (vitamina A en versión ácida) las formas más conocidas. Contrariamente a la creencia popular, el retinol no es un exfoliante sino un antioxidante. Debido a que la tretinoína puede provocar efectos secundarios, siempre será tu dermatólogo de confianza quien te la recete. Por su parte, el retinol está disponible sin receta y en distintos tipos de concentraciones para el cuidado de la piel.
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2 ¿Cuáles son los beneficios del retinol?
En la concentración adecuada y con la composición adecuada (válgase la redundancia), el uso de retinol tiene muchas ventajas. No sólo rejuvenece la piel, sino que también mejora su textura mientras reduce el daño de los rayos UV (aka arrugas y líneas de expresión). Además, el retinol promete una tez uniforme al reducir las cicatrices causadas por el acné, la hiperpigmentación y las (dichosas) manchas. Si Kim K lo emplea para (en sus propias palabras) "ralentizar el proceso de envejecimiento", beneficios tiene que tener seguro.
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3 ¿Y los contras?
El retinol y especialmente la tretinoína pueden irritar la piel (si los usamos de manera incorrecta). ¿Tienes la piel muy sensible o sufres de eczema, rosácea, etc? Entonces, puede que no sea para ti pues la piel puede empezar a descamarse produciendo enrojecimiento y picazón. Si tu piel tiene tendencia acneica, necesitarás armarte de paciencia ya que suele empeorar al principio. Para que te hagas una idea, tardarás unas 4 o 6 semanas en notar los resultados. Otra desventaja del retinol es que, en contacto con el aire, se oxida relativamente rápido, así que opta siempre por un recipiente hermético y guárdalo donde no esté expuesto al sol. *Mega* importante: el retinol vuelve tu piel más sensible a los rayos UV, por lo que nunca -NUNCA- olvides tu protector solar.
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4 ¿Cómo se usa el retinol?
No existe una forma estándar de usar el retinol o la tretinoína ya que cada piel es diferente. Por tanto, es importante que sean aplicados de manera gradual. Por ejemplo, puedes empezar utilizándolo dos veces por semana y -si ves que lo toleras bien- ampliarlo a una vez cada dos días. ¿Sufres de irritación y tu piel es sensible? Consulta con tu derma. Un uso incorrecto de estos activos puede resultar en el efecto opuesto a lo que esperas conseguir: piénsatelo (dos veces) antes de arriesgar.
