Cuando llega el momento de estirarse, hasta los gimnastas más asiduos están expuestos a eventuales dolores musculares. Así elija ejercicios intensos o la práctica de yoga, más ligera, el entrenamiento puede provocar grandes tensiones en sus miembros y ligamentos. ¿La solución? El masaje deportivo.
¿QUÉ ESPERAR?
Al igual que un masaje de los tejidos profundos "sobre esteroides", el masaje deportivo es ideal para las personas que sienten dolor o molestias en una zona específica. Generalmente se combinan técnicas de masaje sueco y shiatzu para garantizar un beneficio máximo, pero el masajista adaptará el tratamiento según sus necesidades. Si bien el masaje deportivo es ideal para tratar dolores causados por actividades deportivas, también es un tratamiento preventivo brillante para personas activas, a fin de evitar lesiones.
Centrado en el aumento de la circulación y la reducción de la inflamación, el masaje puede resultar algo inconfortable por momentos, sin llegar a ser doloroso. En caso de sentir molestias, no dude en decírselo al masajista.
Generalmente se combinan técnicas de masaje sueco y shiatzu para garantizar un beneficio máximo, pero el masajista adaptará el tratamiento según sus necesidades.
A diferencia de otros tipos de masajes, solo se le pedirá que retire la ropa en la zona afectada, en lugar de desvestirse totalmente. El tratamiento puede ser rápido, de treinta minutos, o llevar un par de horas, según la dolencia.
BUENO A SABER
El masaje también puede reducir la tensión arterial y la frecuencia cardiaca, además de estimular el sistema de drenaje linfático y ayudar a mejorar la flexibilidad, haciéndolo ideal para mejorar los resultados en diversos deportes.
Conviene evitar este tipo de masaje en caso de heridas abiertas, várices, trombosis, tumores, melanoma o hemofilia; por otro lado, no conviene para personas con enfermedades infecciosas de la piel.
